Los kits cumplen la función de enseñar a los estudiantes sobre ciencia, tecnología e ingeniería. La característica simplista del equipo permite que jóvenes de 3 años logren familiarizar conceptos complejos con luces y sonidos.
Hace unos días las escuelas volvieron a abrir sus puertas entre listones azules y blancos, discursos y un despliegue masivo de nuevos jóvenes listos para ver qué les depara este año en las aulas. Una visión no tan alejada de lo sucedido en varias partes del país, salvo por el característico afán misionero de siempre buscar destacar ante los demás. Con esta idea en mente, desde hace años la provincia implementa un matiz especial que logre resaltar sus colores sobre los demás, y que este año viene más fuerte que nunca: la innovación.
La palabra innovación dentro de la educación misionera cumple el rol de buscar que los jóvenes verdaderamente se interesen por el estudio, además de adaptar el concepto de institución o escuela a la era moderna, en donde las tecnologías como la inteligencia artificial empiezan a jugar un papel muy importante en la educación.
En este punto es donde la Escuela de Robótica logra resaltar sobre las demás instituciones públicas, dejando en claro por qué es el génesis de lo que hoy llamamos provincia Startup.
El atractivo de la misma es dar a los jóvenes la posibilidad de lograr una hazaña que parece lejana, como la de crear un robot, un factor que impulsa a muchos a inscribirse, pero lo que en verdad atrapa a los alumnos es el hecho de encontrarse con una enseñanza única, personalizada e interactiva, variables que carece la educación tradicional presentada por otras instituciones.
Kits Arduino, la materia prima de la educación misionera
Para lograr mantener el interés educativo de los más de 2500 jóvenes que buscan acceder a la Escuela de Robótica todos los años -cifra perteneciente solo a Posadas, sin contar los 81 Espacios Maker de la provincia-, la misma escuela utiliza como materia prima los Kits Arduino.
Estos dispositivos fueron creados por el Instituto de Diseño de Interacción de Turín (Italia), en 2005, para ofrecer a los estudiantes una manera fácil y económica de construir dispositivos electrónicos. Hoy en día, desde los niños más pequeños hasta los técnicos profesionales, utilizan estos kits para construir todo tipo de dispositivos simples -un encendedor de luces-, y complejos -como robots controlados de forma remota a través de WiFi-.
Dentro de la Escuela de Robótica, y en los Espacios Maker, los kits cumplen la función de enseñar a los estudiantes sobre ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas. Esto se logra gracias a la característica simplista del equipo, que permite que jóvenes de 3 años logren familiarizar conceptos complejos con luces y sonidos.
Ventajas:
Fácil de usar: Arduino es una plataforma fácil de aprender y usar, especialmente para aquellos que comienzan a introducirse en electrónica y programación. La programación se realiza en un lenguaje basado en C y se utiliza un entorno de desarrollo integrado (IDE) que simplifica la programación.
Gran cantidad de recursos disponibles: cuenta con una gran cantidad de tutoriales, documentación y comunidades en línea que pueden ayudar a los desarrolladores a aprender y resolver problemas. También hay una gran cantidad de módulos y kits disponibles para expandir la funcionalidad de Arduino.
Bajo costo: es una plataforma de bajo costo en comparación con otras alternativas, como Raspberry Pi o BeagleBone. Esto lo hace ideal para proyectos de bajo presupuesto o para aquellos que no requieren una gran cantidad de recursos de hardware.
Flexibilidad: Arduino se puede utilizar en una amplia variedad de proyectos, desde robots y sistemas de control hasta proyectos de arte y diseño. La flexibilidad de la plataforma permite a los desarrolladores adaptarla a sus necesidades específicas.
De kits a proyectos innovadores
Dentro de la Escuela de Robótica estos kits se transformaron en grandes proyectos que lograron trascender las fronteras, como fue el caso de los jóvenes misioneros que representaron a todo el país en la Olimpiada Mundial de Robótica, celebrado en Panamá. En un contexto más nacional, los proyectos misioneros fueron destacados por la Liga Nacional de Robótica, al punto de ser elegidos como la sede final de la copa argentina de robótica.
Estos logros también se aplican a lo local, como lo demostró la última Misión StartUp: Gala Final, un evento que reunió los proyectos realizados durante el 2023. Durante el encuentro se mostraron varios proyectos ingeniosos como prótesis biónicas para las personas que sufrieron la pérdida de una extremidad, sistemas de seguridad, o robots barredores.
Como es de esperar los beneficios para el sector agrario también se hicieron presentes, con sensores de humedad, sistemas de riego inteligentes e incubadoras de huevos monitoreadas. Cada uno de estos proyectos fue realizado por jóvenes de la provincia que cambiaron tardes de juego por circuitos y tornillos, todo por el sueño misionero de buscar un mayor progreso, destacarse y seguir proyectando hacia un futuro mejor.
Canal 12