A Europa le faltan “iniciativas de paz valientes” para resolver la situación en Ucrania, expresó el papa Francisco.
Esto lo hizo dirigiéndose a representantes de la Administración y la sociedad civil de Portugal, donde inició su viaje apostólico con ocasión de la Jornada Mundial de la Juventud católica en Lisboa.
“En el océano de la historia navegamos en aguas tormentosas y faltan rutas audaces hacia la paz. Mirando a Europa, a su espíritu de diálogo, uno quiere preguntarse: ¿hacia dónde navegan si no proponen vías pacíficas que conduzcan al fin de la guerra en Ucrania y de tantos conflictos que inundan de sangre el mundo? Y aún más, empujando los límites: ¿qué camino está tomando Occidente?”, declaró Francisco, cuyas afirmaciones fueron difundidas por el portal Vatican News.
El pontífice señaló que las tecnologías avanzadas que han determinado el progreso y la globalización por sí solas no son suficientes.
El jefe de la Iglesia católica romana condenó una vez más la producción y distribución de armas que “sólo empobrecen a la humanidad, quitan recursos a la sociedad, a la salud, a la educación”.
“Sueño con una Europa, el corazón de Occidente, que pone al servicio su habilidad para apagar los focos de guerra y da esperanza a una Europa que encuentra su alma joven <…>, una Europa que cuida a los pueblos y a las personas sin perseguir la ideología de la colonización”, manifestó Francisco.
El pontífice recordó el Tratado de Lisboa de la UE, que declaró la búsqueda de la paz, la seguridad, la igualdad y la solidaridad de los pueblos.
Francisco expresó su esperanza de que las actuales jornadas de la juventud, incluso teniendo lugar en un viejo mundo “que puede decirse que ha envejecido”, den un impulso universal a la apertura y a la juventud. “Porque Europa, la verdadera Europa, es necesaria para el mundo: es necesario su papel de puente con el Mediterráneo, África y Oriente Medio”, añadió.
La Jornada Mundial de la Juventud, que se celebra desde 1986, gira en torno a los temas de la paz y la ecología.
El periódico italiano de la Conferencia Episcopal, Avvenire, comparó el acontecimiento, para el que se esperan hasta un millón de participantes en la capital portuguesa, con una “asamblea de jóvenes de la ONU”.
Para Francisco, de 86 años, se trata del cuarto encuentro de la juventud católica. La primera vez que asistió al evento como jefe de la Iglesia católica fue en Río de Janeiro en 2013, poco después de su elección al trono papal.
Viajó a Cracovia en 2016, y las últimas jornadas de la juventud se celebraron en Panamá en 2019. El actual congreso se pospuso inicialmente debido a la pandemia.
Agencia TASS